domingo, 7 de noviembre de 2010

Looc Madrid: crónica de una fiesta

Fiesta 9º aniversario revista Looc Madrid
Montar los jueves una fiesta en Madrid siempre es tarea peliaguda. No por la organización de la fiesta en sí, si no por la competencia que seguramente esta va a tener. No hay jueves que se precie en el que no haya, por lo menos, tres o cuatro saraos a los que asistir. Y no es siempre decisión fácil escoger. El pasado jueves lo tuve claro: ante la invitación de mi amigo facebookero Jorge Oliva para acudir a la fiesta del noveno aniversario de la revista Looc Madrid no me pude resistir. El lugar escogido para la fiesta me pareció fántastico, absolutamente sorprendente, con un maravilloso halo futurista, por el montaje en sí mismo y por la localización. De nombre Smart Urban Stage, es una curiosa exposición itinerante emprendida por la firma automovilística con la que pretenden mostrar las ciudades del futuro. En Madrid, Smart Urban Stage se encuentra situada de forma temporal (hasta el 11 de noviembre) en la explanada que forman las cuatro torres al final de la Castellana. De un estilo que remite a la estética de una nave espacial, el lugar es ultra fashion para celebrar fiestas como la que celebró Looc. Al parecer, en el puñado de días que la iniciativa permanece en Madrid se han organizado ya unos cuantos Smart Open Source, entre los que se cuentan, el aniversario de Looc.

Con mi chico, Luis, cada uno por su lado. Al fondo a la izquierda, con camisa
de cuadritos, Jorge Oliva.
Un ambiente urban gay dio color a la noche, aunque se echaba a faltar alguna que otra celebrity local. Muchos chicos guapos, alguna pin-up, el actor Pablo Rivero de la serie Cuéntame, los periodistas Rubén Fernández-Cuesta, Elena Solinís y el mencionado Jorge Oliva; empresarios como Fede, cabeza visible de la muy chic tienda de lencería y juguetitos varios Le Boudoir en la calle Almirante 6, Beatriz Jiménez de SQ Comunicación y Luis Linares de Degusta Madrid (muy requerido entre varios de los invitados) o el diseñador Modesto Lomba de la firma Devota y Lomba fueron algunos de los nombres de la sociedad madrileña que se dejaron caer por la fiesta. Andaban por ahí también, claro está, la pizpireta directora de Looc, Paloma G. Oliva, y su editor, Alfonso Llopart, editor a su vez de la conocida cabecera Shangay.

El diseñador Modesto Lomba
Un catering que brillaba por su ausencia no quitó encanto al lugar: copas variadas, una escasa oferta en vino (sólo un tinto de Rioja o un blanco de Rueda donde escoger) y la cerveza ideada por Adrià para la firma catalana Estrella Damm fueron suficientes para alegrar la noche. La música, magistralmente escogida por Agustín Gómez Cascales, redactor jefe de la revista Shangay y pincha de noche bajo el nombre de Damien Dj, amenizó la velada de forma espectacular. Para concluir, reposteria de Dulce Amargo, una firma que, según me comentó Jorge Oliva, son proveedores de la Casa Real.
Una divertida pin-up con su acompañante. Al fondo yo, observando la
popularidad de mi chico.
Al parecer, la noche acabó para muchos en Evaristo Club, un local situado en Marqués de Santa Ana, 11, cuyo propietario, un argentino de nombre Guillermo a mi chico en la fiesta se quiso ligar. ¡Qué cosas!

3 comentarios: