lunes, 9 de agosto de 2010

Mi Barcelona: el Tèxtil Café


Barcelona es una ciudad llena de rincones especiales y de lugares maravillosos. Según mi humilde opinión, un lugar de parada obligatoria es el Téxtil Café, un establecimiento situado en el magnífico patio gótico del Museo Tèxtil i de la Indumentària. Infinidad de veces he visitado este lugar y espero poder seguir haciéndolo muchos años más. En el Tèxtil Café se puede parar a desayunar, comer, cenar o, simplemente, tomarte un cafe rodedado de parte de la historia de esta ciudad mediterránea. En plena calle Montcada (justo enfrente del museo Picasso), está en una de las zonas más turísticas de la capital catalana, aunque al estar situado en un patio interior, escapa de puntillas a la invasión en masa. La terraza, extraordinaria, está situada en el mismo patio y el café propiamente dicho en un recovevo de la misma. Pero lo mejor llega cuando cae la noche: cenar en una de las mesitas de la terraza, a la luz de las velas, es fascinante.
En el Tèxtil Café, además, se da esa rara circunstancia de estar en un entorno alucinante a un coste realmente asequible: el precio de carta ronda los 25 euros, al mediodía tienen menú en torno a los 11 euros, y por las noches y fines de semana también se puede escoger un menú que no llega a los 18 euros. Platos sencillos, pero muy bien elaborados, como quiches, pasteles de verdura, taboulé,humus, moussaka, guacamole o refrescantes y variadas ensaladas es lo que podemos encontrar en la carta del Tèxtil Café. Sin ser un restaurante de cocina exquisita, la gastronomía en el Tèxtil Café es variada, ligera y sana, y el ambiente es absolutamente único. Se puede ir a cualquier hora ya que su horario es ininterrumpido de 10 a 24 horas (fines de semana hasta la 1), aunque si lo que se pretende es tener una velada romántica nada como cenar en el patio a la luz de las velitas.
Hasta el año pasado, en el Tèxtil Café tenían actuaciones en directo algunas noches. No sé si este año continúan (todavía no he tenido el placer de volver), y por alguna extraña circunstancia, la web del café ha desaparecido del planeta Internet dejándome sin fuente de información en tiempo real.

4 comentarios:

  1. Niña, me estás poniendo los dientes largos y ya sabes por qué.........
    Conozco ese bonito café de tu ciudad y me he quedado alguna vez a comer algo sencillito para admirar el lugar.Ayyyyyyy qué ganas de dar una vuelta por ahí y por esos rincones de alrededor.

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  2. ¿A qué sí? Es un lugar estupendo. Al final, por motivos laborales aún estoy en Madrid, con lo cual, imagina cómo están mis dientes, grrrr!!!

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  3. Genial verdad?
    Yo lo descubrí por casualidad un día paseando con un amigo.
    Besos

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  4. Es un lugar fantástico, mágico. Yo lo conozco hace muchísimos años pero no me canso nunca de ir.

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